El uso del transporte público en el AMBA ya está casi en los niveles de prepandemia: el último fin de semana viajó un 93% en comparación a la cantidad que lo hizo en el fin de semana previo al aislamiento de marzo de 2020. En días hábiles la cifra es del 91%. La recuperación, sin embargo, es dispar según los modos de transporte: el Subte exhibe una performance más modesta.
Luego de más de dos años, el transporte público del Área Metropolitana de Buenos Aires parece estar volviendo a la normalidad. De acuerdo con datos oficiales, ya viajan 9 de cada 10 usuarios que lo hacían antes de la pandemia.
De acuerdo con las cifras del sistema SUBE, el pasado fin de semana (sábado 9 y domingo 10 de abril) se movilizaron un total de 1.938.543 de pasajeros diarios promedio, lo que representa un 93% de los usuarios que se desplazaban en un fin de semana promedio previo al aislamiento de marzo de 2020.
Registros similares se obtienen en días hábiles: en la última semana (4 al 8 de abril) se desplazaron 3.868.857 de usuarios diarios promedio, lo que representa un 91% de los usuarios diarios en comparación a un día hábil promedio previo al aislamiento de marzo de 2020.
Las cifras se explican por la mejora sostenida de la situación sanitaria -el pasado domingo se registró un único fallecimiento a nivel nacional por COVID, la cifra más baja desde abril de 2020-, producto del avance de la campaña de vacunación y la reactivación económica en todas las actividades.
En la progresiva normalización que viene observándose en los últimos meses influyó, decididamente, el levantamiento de todas las restricciones de capacidad en colectivos, trenes y subtes, la reapertura de estaciones que habían permanecido cerradas durante la pandemia, y la normalización del horario de servicio, manteniéndose únicamente y por el momento la obligatoriedad del uso de tapabocas.
Con todo, la recuperación de la normalidad de prepandemia parece variar según el modo de transporte: el Subte -si bien viene mejorando sus cifras- exhibe una performance más modesta que los trenes o los colectivos. De acuerdo con los especialistas, esto se debe a una multiplicidad de factores, entre los que se cuentan el impacto del teletrabajo en las cuencas de algunas líneas, y el mayor temor al contagio en el subterráneo, que suele ser percibido por muchos usuarios como un ambiente encerrado y poco ventilado.
EnelSubte.com