El ministro de Economía buscó interpelar a quienes no van a votar, durante su visita a Entre Ríos.
Cuando todavía resonaba el golpe electoral que recibió el oficialismo en Santa Fe, Sergio Massa visitó Entre Ríos, una de las provincias del centro que viene mostrando números que podrían dar el mismo vuelco que su vecina y cambiar de signo. Es por eso que junto al gobernador actual Gustavo Bordet y el candidato Adán “Beto” Bahl, el ministro precandidato convocó al electorado que se queda en la casa enojado y no va a votar.
«A los que nos perdieron la confianza, que nos vuelvan a dar la oportunidad. Estamos dispuestos a trabajar juntos, a reconocer nuestros errores, a pedir disculpas, pero sobre todas las cosas, a pelear por nuestra patria», expresó Massa en Paraná (Entre Ríos), donde inauguró un barrio de 500 viviendas, cuya construcción había quedado paralizada entre 2015 y 2019 y que finalmente el actual gobierno reactivó con financiamiento del gobierno provincial (33%) y nacional (66%). “A los que sienten frustración y están en sus casas les pido que vayan a votar, se hacen las cosas ahora con más fuerza”, dijo Massa frente a los beneficiarios y beneficiarias de las viviendas.
Según pudo saber Tiempo, la estrategia en Entre Ríos, provincia del centro del país que podría cambiar de color político en las próximas elecciones, que se realizarán junto con las nacionales ya que comparten las fechas del cronograma electoral. Las encuestas muestran que Rogelio Frigerio, el exministro macrista, había empezado con 20 puntos arriba a principios de año y ahora la diferencia se achicó.
En Entre Ríos sostienen que Frigerio puede terminar teniendo una performance electoral similar a la de Carolina Losada. Los une su residencia y actividad principal en la ciudad de Buenos Aires, lo que enoja a los entrerrianos. En ese contexto de ausentismo, Massa le pidió al candidato a gobernador y a los intendentes que vayan a buscar el voto.
Es que, por lo bajo, cerca del ministro analizan que la derrota del peronismo en Santa Fe se debe a “la mala gestión provincial y nacional, pero hay que mirar para adelante”. De hecho, luego de su paso por Entre Ríos, Massa festejó junto a la vicepresidenta Cristina Fernández, los 15 años de la recuperación de Aerolíneas Argentinas, un hito que el entonces flamante jefe de Gabinete, anunció apenas había asumido a través del envío al Congreso del acta de acuerdo firmado por el gobierno para poner en marcha el proceso de estatización de la línea de bandera.
Apurado, antes de que este miércoles 19 se cierre el periodo de anuncios de gobierno, según marca el calendario electoral, Massa se mostró con la vicepresidenta dentro del simulador de vuelo. “Alguien debería inventar algún simulador de presidentes urgentemente, donde lo pusiéramos a uno con los números y problemas de la Argentina, no con los de Suiza, ni con los de Suecia. Muchas veces simulamos en Argentina como que la inflación o el FMI y la deuda son fenómenos de la naturaleza. No son fenómenos naturales, los han provocado, los han traído”, dijo Cristina, en obvia referencia a sus ya conocidas críticas a Alberto Fernández.
Por lo pronto, Massa no piensa en dejar el ministerio. En medio de las tensas negociaciones con el FMI, etapa que estima finalizar este viernes con un acuerdo favorable para el país, el ministro recibió un llamado de Kristalina Georgieva quien le preguntó a quién pensaba dejar al frente del barco si se fuera a recorrer el país de campaña. Por lo que el ministro por ahora deberá usar los dos trajes: el de gestión y el del proselitismo.
Cerca del ministro que se imagina presidente saben que “la carrera es larga” y tienen diseñada una hora de ruta a la que se van a apegar sin darle tanta atención a las encuestas, que este domingo una vez más demostraron no ser herramientas fidedignas a la hora de pronosticar.
Por lo pronto Tiempo pudo saber que Cristina participará de la campaña siempre que se aludan a temas propios del mundo kirchnerista como la restatización de Aerolíneas, YPF o hitos relacionados a la defensa de los derechos humanos, como fue la repatriación del avión de los vuelos de la muerte. “Ella elige y una vez que entra en escena, el acto lo organiza el kirchnerismo”, explican desde el massismo.
Otro que tiene rol asignado es Julián Domínguez, quien dentro del armado del massismo quedó a cargo de los acuerdos sectoriales, ya sea con empresarios, sindicatos o universidades.
En tanto, ya viajó la comitiva del equipo económico integrada por el viceministro de Economía, Gabriel Rubinstein, el jefe de Gabinete de Asesores Leonardo Madcur; el vicepresidente del Banco Central, Lisandro Cleri y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo, quienes llegarán a Wahington este martes, para sellar el acuerdo técnico con el Fondo Monetario Internacional. Massa sueña con poder pagarle al Fondo los intereses, pero también el capital, con acumulación de reservas provenientes de las exportaciones de gas y petróleo. En el ministerio estiman un superávit comercial de 43 millones de dólares para el año que viene. Parte de eso, lo absorberá el Fondo.
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