Una de las principales atracciones del municipio de Tigre se encontraría a punto de cerrar sus puertas, los empleados denuncian que la empresa no paga los salarios.
Los trabajadores del emblemático parque de diversiones Parque de la Costa, ubicado en el municipio de Tigre, se encuentran en una situación crítica debido a que no perciben su salario desde marzo y, en medio de rumores de cierre, no cuentan con ninguna vía de comunicación con la patronal.
En concreto, se trata de más de 500 trabajadores que se encuentran en estado de incertidumbre ante la falta de respuestas por parte de la empresa. Algunos de ellos pertenecen a la empresa desde su fundación en 1997, cuando fue inaugurado como el parque de diversiones más grande de Sudamérica.
El complejo, ubicado entre los ríos Luján y Tigre, junto a Aquafan, el Teatro Nini Marshall y el Casino Trilenium, pertenece al holding empresarial de la Sociedad Comercial del Plata, cuyo presidente Ignacio Noel fue denunciado por no abonar salarios y despedir empleados, algo prohibido por el DNU firmado por el Presidente en julio.
Cabe destacar, que el parque de diversiones se encuentra, desde fines del 2019 en concurso preventivo de acreedores, pese a que el holding factura millones en negocios energéticos y que el casino facturaba 50 millones de pesos por año.
“Hoy estamos a la deriva, no sabemos qué va a pasar con el parque ni con los puestos de trabajo, son muchos años y nos encontramos con un silencio absoluto por parte de la empresa y un grupo de señores que solo nos atienden para que nos retiremos”, declaró un delegado.
En ese sentido, a fines de marzo la firma solicitó ser incluida en el plan de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), por lo que los empleados perciben el 60% del sueldo, mientras que la empresa solo deposita un 15%.
“Sentimos que la empresa está abandonando el barco y que quedamos nosotros naufragando, siendo que durante años nos pidieron que nos pongamos la camisera, cosa que hicimos sin dudar, para cuidar y preservar el parque.”, detalló un trabajador.
Lo que empeora la situación es que, por el momento, no hay en vistas protocolo reapertura. Esto preocupa a la planta operaria que sospecha que el desmantelamiento, llevado adelante los últimos días, del teatro Niní Marshall “sería el comienzo de un desguace generalizado”.
“El municipio promete ocuparse e interceder pero no pasa nada. Sergio Massa tuvo mucho que ver en el crecimiento de todo, hasta se pensó que era el dueño del Niní Marshall, pero hoy tampoco dice nada”, señaló el delegado.
Finalmente, con la incertidumbre sobre qué pasará con 500 fuentes de trabajo, los operarios esperan que el del Ministerio de Trabajo tome cartas en el asunto, instancia que está en suspenso ya que desde la empresa no dan ningún tipo de señales.
Diputados Bonaerenses